Cientos de turistas nacionales que llegan a bordo de autobuses foráneos a la zona de Caleta y Caletilla, en el área del Acapulco Tradicional, deben caminar sobre las pestilentes aguas negras que brotan de las alcantarillas ubicadas en la calle principal de esa zona turística.

Las aguas negras que expiden malos olores inundan parte de la avenida principal, por donde caminan los visitantes al momento de dirigirse a la playa y al área de restaurantes en playa Caleta, una de las áreas más concurrida por turistas y acapulqueños durante los fines de semana.

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María Scarlet Marín Fuentes, originaria de la Ciudad de México, dijo que Acapulco es un destino de playa que cumple con todo lo que se requiere para ser considerado como el mejor del país y del mundo, sin embargo las aguas negras le dan una mala imagen y esto hace que pierde todo lo que tiene para disfrutarlo.

“Es necesario que la autoridad haga algo para terminar con el problema de las aguas negras que hay en las calles, sobre todo en la zona turística, dan una mala imagen, además de ser una fuente contaminación y de riesgo para la salud no sólo de los visitantes sino de los acapulqueños que también corren el riesgo de sufrir algún tipo de enfermedad por los malos olores”, expresó.

Las aguas negras, que brotan constantemente de las alcantarillas en la zona de Caleta y Caletilla, en ocasiones llegan hasta la zona de la playa, lo que complica más el problema de contaminación y de salud.

En la zona de Caleta y Caletilla es muy constante el problema de los escurrimientos de aguas negras que brotan de las alcantarillas, que muchas veces es producto del colapso en el que se encuentra el drenaje sanitario de esa parte de Acapulco, además de que propietarios de negocios y restaurantes las utilizan para arrojar desechos de alimentos y aceite.