La irrupción de hombres armados en la escuela primaria número 7 "Francisco Sarabia", que se ubica en el eje central circuito interior de Ciudad Renacimiento, para llevarse a una mujer que vendía golosinas en un puesto ambulante, generó temor en el magisterio y no se descarta que este jueves paren labores en varias escuelas y resurja el reclamo de seguridad fija por parte de militares.
Esto después que este miércoles por la mañana llegaron al plantel educativo, dos personas armadas que se desplazaban en un vehículo de la marca Volkswagen tipo Jetta de color gris y detuvieron a una mujer que vendía golosinas en un puesto ambulante a fuera de la escuela primaria, lo que provocó que se suspendiera clases por parte del personal docente.
Los padres de familia acudieron a traer a sus hijos y reclamaron a las autoridades no haber puesto vigilancia fija por efectivos del ejército mexicano, como se hace en otras escuelas ubicadas en la misma ciudad Renacimiento, por ser una de las colonias más peligrosas del puerto de Acapulco.
Por eso advirtieron que este jueves no iban a llevar a sus hijos a la escuela hasta que se designe vigilancia fija, porque actualmente cuenta con un guardia de seguridad privada, pero desarmado y por eso nada pudo hacer para evitar que se llevarán a la vendedora de golosinas.
Mientras que el delegado de los Servicios Educativos de la Región Acapulco-Coyuca, Alfredo Miranda Vergara, confirmó que no hubo ninguna privación de la libertad de maestro o maestra en la escuela primaria número 7 "Francisco Sarabia", pues en realidad la persona que fue víctima de los civiles armados es una vendedora de golosinas.
El funcionario de la Secretaria de Educación Guerrero {SEG) explicó que después de difundirse el supuesto plagio de una maestra en el plantel escolar de Renacimiento, personalmente se trasladó para verificar los hechos y pudo comprobar que no hubo privación alguna de la libertad de ningún docente y confirmó que se determinó no trabajar este miércoles.