El enfermero Joel Hernández Gómez, cumplió cuatro semanas sin probar alimentos como parte de la huelga de hambre que mantiene a las afueras del Hospital General de Acapulco para exigir su reinstalación como trabajador de base de la Secretaría de Salud en Guerrero.
El pasado lunes primero de julio del año en curso, Hernández Gómez decidió instalarse en un campamento improvisado instalado a un costado de la entrada de ambulancias del mencionado lugar, con la finalidad de ser escuchado por las autoridades en la materia para que le regresen su empleo en el hospital Donato G. Alarcón de Ciudad Renacimiento, el cual le fue presuntamente quitado de manera injustificada.
Este 27 de julio, la doctora Miriam Pérez Narcia, quien se sumó al movimiento hace dos semanas, se retiró de la huelga debido a que su exigencia fue solucionada por el secretario Carlos de la Peña Pintos, quien se comprometió a través de un oficio.
Mientras tanto, Hernández Gómez dijo que no desistirá a pesar de los efectos que en su salud pueda ocasionar el estar sin comer, hasta que le sea contratado nuevamente con los mismos beneficios como estaba.