"El Tamarindo", testigo de amores, historias y tragedias

El emblemático sitio, distinguido por un gran árbol de ese rico fruto, ha sido escenario de balaceras, asaltos e historias de amores

Celso Castro | El Sol de Acapulco

  · sábado 19 de febrero de 2022

El sitio emblemático para los residentes y turistas, se localiza entre las calles Tadeo Arredondo y Noria. / Foto: Martín Gómez | El Sol de Acapulco

La parada de "El Tamarindo", es un sitio emblemático para los residentes y turistas, que se localiza entre las calles Tadeo Arredondo y Noria , que ha sido fuente de historias urbanas y de tragedias, derivadas de la violencia que se padecen en el puerto de Acapulco.

¿Pero quién bautizó este lugar con el nombre de esta fruta que pertenece a la familia de las leguminosas? De acuerdo a la versión de algunos de los viejos propietarios de negocios de esa zona del primer cuadro de la ciudad, coinciden que en realidad es anónimo.

En lo que sí están de acuerdo es que alguien se le ocurrió poner como referencia el tamarindo, porque ahí creció un árbol de esta fruta y era un punto para tomar el transporte público, así fue como se le empezó a decir la parada de "El Tamarindo".

Esto data de hace ya varias décadas, lapso en el cual se han construido leyendas urbanas, que van desde lo fabuloso hasta lo real, adornado con elementos que rayan en la fantasía, pero que algunos dan como verídicos.

Esto se debe a que esta zona, por la gran cantidad de cantinas y sitios donde las mujeres se exhiben con diminutas faldas para atraer a los que llegan a trasnochar ya buscar sexo servicio, al calor del alcohol magnifican la realidad y le dan vuelo a la imaginación.

Sin embargo, lo que sí es una realidad, es que la parada de "El Tamarindo", ha sido mudo testigo de balaceras, ejecuciones a balazos y asaltos, por lo que para las autoridades es un foco rojo por sus altos índices de violencia.

La parada de "El Tamarindo", sigue siendo escenario de muertes violentas y atracos. / Foto: Martín Gómez | El Sol de Acapulco


Este escenario, ha dado pie que muchos negocios están cerrados y sólo unos cuantos siguen funcionando a pesar de que ya no es seguro; además tienen que pagar la extorsión de que son víctimas por los grupos delincuenciales que controlan la plaza.

Los parroquianos que se aventuran a trasnochar, se juegan la vida, porque corren el riesgo de quedar en el fuego cruzado, pero también ser sorprendidos por algún asaltante, de esos que visten minifaldas y tacones de aguja, que ocultan el bello de los pechos con brasier con relleno y hablan con voz ronca.

Existe un suceso de hace algunos años que fue nota periodística nacional, un hombre adulto mayor que estuvo ingiriendo bebidas embriagantes en una cantina que está sobre Velázquez de León, salió para tomar su transporte en la parada de "El Tamarindo", pero nunca llegó.

La zona de tolerancia fue punto de encuentro de turistas, porteños, políticos y artistas de talla internacional. /Foto: Abraham Martínez | El Sol de Acapulco.

Al menos tres hombres vestidos de mujer lo interceptaron ya golpes lo despojaron de sus objetos de valor , pero no conforme con esto le rociaron gasolina y le prendieron fuego, sus gritos hicieron que salieran otros parroquianos y lo auxiliaron, apagando el fuego que lo abrazaba, pero debido a la gravedad de sus quemaduras, murió.

Actualmente, hay patrullajes por parte de la Guardia Nacional, policías estatales y municipales, así como de militares, para dar seguridad a la zona, pero pese a este blindaje la parada de "El Tamarindo", sigue siendo escenario de muertes violentas y atracos.

Por cierto el árbol original ya no existe, una plaga de termitas lo derribó, pero en ese mismo sitio se plantó otro tamarindo y es el que actualmente se yergue y da sombra en el día a los que esperan su transporte público en ese lugar.