El gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, reconoció que uno de los principales pendientes de la banca ha sido llevar los servicios a las comunidades y regiones más apartadas del país, de las cuales muchas se localizan en el estado de Guerrero, sobre todo para inhibir el uso del efectivo y disminuir la inseguridad que conlleva manejar de esta manera los recurso.
En conferencia de prensa, Díaz de León, consideró que los bancos deben tratar de ser amigables con los usuarios para crear confianza y puedan utilizar los servicios financieros, además deben llegar a las zonas más alejadas, para que no existan intermediarios y los ciudadanos puedan recibir su dinero de forma directa.
“El reto es llevar todos estos métodos de pago a las comunidades porque muchas veces se viven temas de inseguridad, porque si se pueden hacer las transferencias de celular a celular sin usar el efectivo puede ser la alternativa más ágil y sin riesgos en Guerrero y otros estados”, expresó.
Cabe recordar, que tan solo en 2016 y 2017 se registraron tres ataques contra empleados de Bansefi, quienes llevaban dinero en efectivo para pagar a los ciudadanos del programa Prospera, debido a que en municipios como Ahuacuotzingo, en la Sierra de Guerrero no existen sucursales bancarias y mucho menos internet para usar aplicaciones.
Consideró que casos como este, además de los asaltos pueden evitarse si se deja de utilizar el efectivo y se migra a los servicios digitales financieros, para ello, se requiere de mayor infraestructura en el país, situación en la que la banca ya está trabajando.