En medio de un clima de tensión y ante el miedo deuna nueva incursión de civiles armados, habitantes del poblado LaConcepción, ubicado en la zona rural de Acapulco, dieron cristianasepultura a seis de los once muertos que dejó el enfrentamiento atiros con comunitarios de la CRAC, ocurrido el domingo, en el queparticiparon también policías estatales y efectivos del EjércitoMexicano.
Ayer por la mañana, familiares y amigos de lospolicías de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado deGuerrero (UPOEG), les dieron el último adiós en el panteónmunicipal, resguardados por un grupo de elementos de la FuerzaEstatal, apoyados con la vigilancia desde el aire por unhelicóptero.
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Esta población rural que se encuentra a 40 minutosdel puerto de Acapulco, se asemeja a un pueblo fantasma, puesdespués de la balacera, algunos de sus habitantes huyeron portemor a una nueva incursión armada y otros optaron por encerrarseen sus casas, aún con miedo de que se lleguen a registrar nuevoschoques con civiles afines a Marco Antonio Suástegui Muñoz,vocero de la CRAC.
En la calle principal no se observó movimientoalguno y la mayoría de los vecinos acudió a la inhumación de lasseis víctimas de la UPOEG: Obdulio Mongoy Dorantes, AlejandroMelchor León, Alejandro Melchor Ángel, Daniel Everardo Miranda,Jesús Estrada Calixto y Alexis Estrada Asencio.
Escenas de dolor de los familiares hicieron mástenso el momento. Nadie hizo declaraciones y sólo expresaron suexigencia de justicia, pero también rechazo a los representantesde los medios de comunicación, a quienes literalmente corrierondel cementerio y advirtieron que serían “linchados” si no seretiraban.
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Algunos de los dolientes azuzaron al resto de lagente y buscaron proveerse de palos y piedras, a la vez queadoptaban una actitud agresiva, lo que obligó a los comunicadoresa retirarse sin poder tomar los pormenores del acto fúnebre.
Los mismos policías estatales pidieron a losreporteros que salieran del pueblo, “pues no nos hacemosresponsables de lo que pueda ocurrirles. No queremos otroenfrentamiento, retírense de inmediato”, fue la orden que se dioy se tuvo que acatar, porque algunos pobladores corrían haciadonde estaban los representantes de la prensa.
Mientras, se informó que de los 38 comunitarios dela CRAC que se detuvo el mismo domingo, el vocero Suástegui Muñozestá en prisión y el resto rinde su declaración en la FiscalíaRegional de Justicia, sobre estos dos enfrentamientos que dejaronuna estela de once muertos.
