Detenciones, accidentes, consumo de drogas legales e ilegales, fue parte de los momentos que se registraron ayer en el marco del segundo día de la presencia de miles de motociclistas que participan en el Aca Moto 2018.
Como es costumbre, la Policía Vial cerró la avenida costera Miguel Alemán en punto de las 10:00 de la noche, para realizar arrancones clandestinos y acrobacias, desde Disco Beach hasta el condominio Condesa, en la avenida costera Miguel Alemán; lugar que estaba cercado con vallas metálicas para proteger a las familias de porteños y turistas que se dieron cita para apreciar la exhibición.
Desde la glorieta de la Diana Cazadora, hasta la esquina de la calle Costera Vieja, se pudo apreciar miles de personas en motocicletas de distintas marcas y demarcaciones, ingiriendo bebidas alcohólicas y fumando cigarros de hierba verde con las características de la marihuana (por el olor que despedía), a pesar de que el evento estuvo sitiado por la Policía Federal, municipal con equipo antimotín y elementos del Ejército; mientras que la banqueta quedó convertida en un mercado semifijo.
A pesar de que se habilitaron los carriles con sentido Base-Centro de la citada arteria para la circulación de los vehículos, la afectación a la movilidad fue evidente, provocando la inconformidad de los automovilistas.
Los operativos policiacos se determinaron en las inmediaciones del evento y en recorridos a pie de tierra, sin embargo, éstos no impidieron que los motociclistas se saltaran el reglamento de Tránsito circulando sin casco protector y con más de dos pasajeros a bordo.
Hasta la hora del cierre de la avenida, no se tenía reporte de accidentes fatales, ni de derrapes en la zona de concentración; sin dar cifras exactas, las autoridades informaron que se tenía conocimiento de seis accidentes en moto, los cuales fueron menores y alrededor de 30 motocicletas decomisadas a lo largo del día. Mientras tanto, la tienda de autoservicio Oxxo que fue saqueada en el mismo evento, pero del año pasado, se observo funcionando, pero con la presencia de dos elementos de seguridad privada en su entrada principal.