El párroco de Acapulco, Juan Carlos Flores Rivas, aseguró que la iglesia católica desconocía la aparición de una segunda imagen religiosa que llora sangre en la zona rural del municipio.
De acuerdo a versiones de los vecinos, el pasado 31 de octubre del presente año una imagen de metro y medio del Sagrado Corazón de Jesús comenzó a derramar lágrimas en la misma casa donde hace meses un niño Dios hizo lo mismo, las primeras fueron trasparentes y para los días siguientes expulsó un líquido con color marrón que se asemeja a la sangre.
Consultado vía telefónica, el sacerdote aseguró que volverá a exponer el caso ante las autoridades de la iglesia en el puerto, con la finalidad de que se den seguimiento a las indagatorias y comprobar con ello la veracidad del acontecimiento.
Destacó que la familia no se ha acercado a la iglesia para confirmar el hecho, sin embargo, las dos imágenes han ganado gran popularidad entre los creyentes, quienes acuden para hacerle ofrendas y pedirles favores.