El subsecretario de asuntos políticos, sociales y religiosos municipal, Marco Antonio Adame Bello, aseguró que el retiro de la imagen de la virgen de Guadalupe del Ayuntamiento no tiene que ver con el conflicto que surgió entre funcionarios y la iglesia católica por la inhumación de un sacerdote dentro de una parroquia y aseguró que esto se trata de una restructuración de las oficinas.
Consultado a su llegada al Palacio Municipal, el funcionario destacó que la medida fue tomada con distintas áreas por el movimiento que existirá para "eficientar los servicios que presta el gobierno", para lo cual fue retirada la imagen, asegurando que está se encuentra en un lugar adecuado para evitar su deterioro.
"Hay una restructuración de espacios que van a hacer varias modificaciones y a eso obedece el movimiento. Normalmente no tendría que haber imágenes religiosas dentro del Ayuntamiento, pero si hay la petición de que se vuelva a colocar podríamos buscar un espacio, ahorita no tenemos conocimiento de algún planteamiento de este tipo", indicó.
Adame Bello dijo no tener conocimiento de que exista algún documento que avale la instalación de la imagen de la virgen y aseguró que se investigará su posible existencia, destacando que no buscarán confrontarse con ninguno de los empleados del Palacio Municipal.
Agregó que en este sitio de donde fue removida, posiblemente sea utilizado como un módulo de información a los ciudadanos, debido a que es el motivo del movimiento estructural de las oficinas que están realizando.