El Senador de la República por el PRI, Manuel Añorve Baños, lamentó que, el gobierno de México haya cambiado el destino de los recursos de la minería en el país, donde el estado de Guerrero recibía hasta 143 millones de pesos al año que eran utilizados para obras de infraestructura social, educativa y de protección al medio ambiente en los municipios donde se desarrolla esta actividad.
Al fijar su postura sobre este tema, el legislador recordó que para el paquete económico 2020, se desvirtuó el fondo minero, porque el último año que funcionó de forma adecuada fue el 2018, cuando las entidades con esta actividad recibieron el recurso que era de gran ayuda, incluso para los municipios.
“Con la configuración original del fondo minero, del 100 por ciento recaudado de los rubros antes mencionados, 20 por ciento se quedaba en la federación, 2.5 se canalizaba a la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano, y con el 77.5 restante, se integraba el Fondo para el Desarrollo Regional Sustentable de Estados y Municipios Mineros, que se repartía en un 37.5 para los estados y 62.5 para municipios, donde se realiza la extracción minera”, explicó.
Añorve Baños, lamentó que, con las modificaciones a los artículos 271 y 275 de la Ley Federal de Derechos, se eliminó la noción original del fondo minero, y ahora, todos los recursos obtenidos para la contribución extraordinaria que le cobran a las empresas mineras, se destinan en un 85 por ciento a la SEP, en un 5 por ciento a la Secretaría de Economía y en un 10 por ciento al gobierno federal, mismos que se destinan a programas de infraestructura aprobados en el Presupuesto de Egresos de la Federación.
“Ahora solo el 5 por ciento de los recursos que aporten las empresas mineras de manera extraordinaria, serán reinvertidos en mejoras para las comunidades mineras…O sea, solo 5 pesos de cada 100 que se obtienen de las contribuciones de empresas mineras, regresarán a las comunidades y municipios en donde se llevan a cabo estas actividades”, detalló.
Recordó que, la Minería contribuye con el 4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y se estima que genera más de 2.6 millones de empleos, entre directos e indirectos y solo en Guerrero genera 10 mil trabajos directos y 50 mil puestos indirectos.