Una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) interpuso una damnificada por el sismo del pasado 7 de septiembre del fraccionamiento Pedregal de Cantaluna, luego de que fue agredida por una servidora de la Secretaría de Bienestar, durante la realización del censo de viviendas afectadas por el sismo.
La agredida Elideth Ramírez Leyva, del fraccionamiento ubicado en la zona Poniente de Acapulco, fue tratada de manera déspota y prepotente a tal grado de recibir gritos por parte de la servidora de la nación que fue a levantar el censo, sólo por quejarse de que su vivienda se le calificó con daños menores.
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La afectada detalló que las personas que levantaron el censo la trataron de manera cruel, amenazandola que si no estaba de acuerdo con el dictamen que habían calificado, romperían la cédula de censo.
Dentro de la vivienda con notorios daños en sus paredes, le manifestaron que ella ya estaba dentro del programa y que posteriormente la visitarán gente especializada para determinar si sus daños son graves.
Sin embargo, pese a tener su vivienda (departamento) en la planta baja fue declarado perdida total, pero para los servidores de la nación sólo son daños menores narró Elideth Ramírez, durante la presentación de la queja.