Un convoy con 300 elementos de la Guardia Nacional (GN) arribó al puerto de Acapulco, en un esfuerzo por frenar la espiral de violencia que se detonó por la disputa frontal entre grupos antagónicos vinculados con el crimen organizado.
La fuerza federal entró por la zona Diamante a las instalaciones de la IX Región Militar y después bajaron a Walmart, en donde se concentraron para hacer un recorrido por la costera Miguel Alemán.
Lea también: Hombres armados incendian automóvil a la altura de Cayaco
El inspector en jefe José de Jesús Mora Robles, Comandante del Cuarto Batallón de Guardia Nacional, explicó que llega con 8 oficiales y 295 elementos de escala básica en 38 vehículos tipo camionetas y cinco camiones de transporte de tropa de 6.5 toneladas, así como 2 ambulancias.
Dijo que todo este personal operativo de Guardia Nacional vienen de toda la República Mexicana, con el objetivo de reforzar la seguridad y negó que lleguen para renovar algún otro contingente, haciendo hincapié que suman ya 710 elementos de la fuerza Santa Lucía que la integra GN y Secretaría de la Defensa Nacional.
El alto mando federal precisó que su objetivo central es brindar seguridad a la población con la colocación de puestos de seguridad ciudadana y recorridos en diferentes puntos, para frenar la violencia que genera la delincuencia organizada.
El inspector en jefe Mora Robles, indicó que tienen identificadas colonias con mayor incidencia delictiva como es el Fraccionamiento Las Playas, Las Cruces, Renacimiento, Pie de la Cuesta y la Zona Centro, aunque su prioridad es toda la ciudad.
Exhortó a la población hacer sus denuncias anónimas en las que no se requiere sus generales, solo proporcionar los datos básicos para poder intervenir e inhibir la violencia.
Vamos a mantener una estrecha coordinación con las otras corporaciones policíacas de los tres órdenes de gobierno, para dar resultados y no tenemos fecha de permanencia, estaremos en Acapulco hasta que lo ordene la superioridad.
Cabe señalar que su llegada se da en medio de un recrudecimiento de la violencia, que ha arrojado un saldo de muertos y vehículos calcinados, sin que hasta el momento haya detenidos por estos hechos de violencia.