La falta de conciencia en los habitantes de la zona poniente del puerto de Acapulco y la casi nula recolección de desechos en poblados alejados, han convertido en tiraderos clandestinos algunas partes de la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, representando un foco de infección.
Desde hace años, pobladores de San Isidro y Pedregoso, enfrentan la problemática de los tiraderos clandestinos, ocasionados por recolectores de basura clandestinos que, por unos pesos, se llevan los desechos de casas habitación y negocios, para arrojarlos en plena vía pública a un costado de donde pasan los vehículos.
Cucarachas, gusanos y ratas pueden ser observados entre las bolsas de desechos, buscando que comer mientras que los perros rompen los empaques dejando al descubierto los pañales y desperdicios de comida, mismos que son arrastrados por las lluvias hasta los cuerpos de agua.
De acuerdo a la señora Leslie Heredia, la problemática lleva décadas aconteciendo, situación a la que los distintos gobernantes en turno no han hecho frente a través de la implementación de sanciones para los infractores, ya que servicios municipales sólo se limita a recolectar la basura, pero los que ocasionan los tiraderos son renuentes.
"Los bien de multar o llevar detenidos como dijeron, toda esta basura va a terminar a la laguna cuando llueve y eso está mal porque de ahí pescan muchas familias", indicó la mujer que se dirigía al mercado del poblado de Pie de la Cuesta.
En declaraciones, los locatarios del mercado aledaño aseguraron no ser los causantes de la contaminación, puntualizando que son personas que vienen desde otros poblados los que alimentan el punto negro con sus bolsas de basura diariamente, ya que al mercado pasa con regularidad el camión recolector de Saneamiento Básico.
Lo cierto es que la laguna de la zona poniente de Acapulco enfrenta severos problemas de contaminación, uno de ellos por la basura y el segundo por las aguas negras que son vertidas por la CAPAMA, ya que la planta de tratamiento no funciona y arroja crudos los líquidos que provienen desde los domicilios.