La Semana Santa, conocida también como Semana Mayor es un tiempo de oración y reflexión. Los cristianos conmemoran el Triduo Pascual, que significa los momentos de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo.
Pero este año la pandemia del Covid-19 ha cambiado las celebraciones litúrgicas y costumbres en todo el mundo.
Este Domingo de Ramos, durante el rezo del Ángelus en la Basílica de San Pedro, el papa Francisco dijo que la crisis económica provocada por la pandemia del Covid-19 "se ha hecho muy pesada", por lo que es necesario ayudar "a tantas personas en dificultad".
"Por segunda vez vivimos la Semana Santa en el contexto de la pandemia. El año pasado estábamos más conmocionados, este año estamos más probados. Y la crisis económica se ha hecho más pesada", dijo el Sumo Pontífice.
En México se iniciaron los festejos religiosos de Semana Santa con un Domingo de Ramos híbrido, los templos transmitieron la ceremonia por internet y con restricciones de aforo.
En Iztapalapa se realizó la escenificación de manera virtual y al aire libre.
Este Viernes Santo, por segunda ocasión, los habitantes celebrarán a puerta cerrada y sin público la Pasión y Muerte de Jesucristo.
De la misma manera en Acapulco, feligreses celebraron a puerta cerrada y con la mínima gente la Pasión de Cristo, para no perder la tradición ni la fe de quienes predican el catolicismo.
Triduo Pascual de Semana Santa
El Triduo Pascual es el momento en el que la liturgia cristiana católica y no católica recuerdan y conmemoran la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús de Nazaret, y constituye el momento central de la Semana Santa y del año litúrgico.
Domingo de Ramos
Es la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén, dando inicio a la Semana Santa; en esta celebración los feligreses acuden a misa con sus ramos de palma para recibir la bendición y llevarla a sus hogares.
Estos ramitos son considerados como un símbolo de riqueza y fecundidad para el pueblo judío, pues en aquel tiempo se podía utilizar para hacer pan y miel.
Jueves Santo
Se conmemora la institución de la Eucaristía en la Última Cena de Jesús con sus apóstoles, la orden sacerdotal y el lavatorio de pies.
El agua de los lavatorios simboliza la pureza y los pies representan la sumisión de quien los lava o besa. Si no puedes ir a la Iglesia, el padre o la madre puede lavar los pies a los miembros de su familia, para ello sólo necesitaras una tinaja con agua y una toalla.
Viernes Santo
Se recuerda la crucifixión y muerte de Jesús de Nazaret para salvar al hombre del pecado y darle vida eterna. Este día, la Iglesia católica manda a sus fieles a guardar ayuno y abstinencia de carne como penitencia.
El color Litúrgico es el rojo. puedes decorar tu comedor con un mantel o listón de este color con un crucifijo al centro de la misma. En las puertas, balcones o ventanas puedes poner una cruz representativa del momento solemne.
Sábado Santo
Se recuerda el paso de Jesús entre la muerte y la resurrección. Este es el tercer día del Triduo Pascual, que concluye con la llegada del Domingo de Resurrección.
Este día los creyentes de la religión católica acostumbran aventar agua y mojarse en muestra de júbilo. La tradición de mojarse sigue siendo muy arraigada en México, pese a las restricciones legales por la escasez del vital líquido.
Domingo de Resurrección
Conocido también como Domingo de Pascua, marca el final de la Semana Santa y del Triduo Pascual, en la que se conmemora la muerte y resurrección de Jesucristo al tercer día después de su crucifixión y su primera aparición ante sus discípulos.
Las familias pueden celebrar en su hogar con alegría y devoción, si tienes un cirio mantenlo encendido durante este Domingo de Resurrección en casa. Si no cuentas con uno, puedes usar una vela o veladora.
Para evitar se incrementen los contagios de coronavirus, la Iglesia católica llamó a participar en las celebraciones centrales -Jueves Santo, Viernes Santo, Sábado Santo y Domingo de Resurrección- de manera virtual y desde el hogar, lo cual no es un obstáculo para su encuentro con Dios.
Lo principal de esta Semana Santa es meditar y reflexionar sobre nuestras acciones, acercarnos más a Dios y mejorar la vida de quienes nos rodean.