Cierran 100 casas de materiales por inseguridad en Acapulco

Propietarios de casas materialistas dijeron que es imposible cubrir las cuotas mensuales que les exigen presuntos integrantes de grupos delictivos

Enrique Hernández Campos

  · viernes 4 de enero de 2019

Crece la extorsión contra comercios. / Foto: Archivo El Sol de Acapulco

Ante la problemática delictiva que se tiene en la ciudad, propietarios de casas materialistas demandaron al gobierno municipal implementar acciones de seguridad para evitar que se incremente el número de negocios cerrados por los pagos de cuotas.

Los empresarios, quienes no dieron a conocer sus nombres por el temor que representa, manifestaron que de 300 casas de materiales que funcionaban en la ciudad, 100 ya fueron cerradas debido a que es imposible cubrir las cuotas mensuales que les exigen presuntos integrantes de grupos delictivos, las cuales van desde los cinco hasta los 50 mil pesos.


Dijeron que las zonas de la ciudad donde se registra el mayor número de negocios cerrados por las extorsiones, son la Zapata, Ciudad Renacimiento, Sector Seis, así como la Unidos por Guerrero y Jardín en sus tres secciones, por lo que es en éstas a donde la autoridad debe de enfocar las acciones de manera inmediata.

Minutos después de haber sostenido ayer una reunión en privado con la alcaldesa, Adela Román Ocampo, los empresarios materialistas reconocieron que, si no se tiene una respuesta inmediata en el tema de la seguridad, en poco tiempo se podría estar incrementando el número de negocios cerrados por el problema de la extorsión.

Abundaron que el pago de las cuotas que hacen en depósitos bancarios o en tiendas de autoservicios, no sólo están acabando con el patrimonio de los empresarios, sino también con fuentes de empleo, ya que, por pagar grandes cantidades, se han visto en la necesidad de disminuir el número de trabajadores de 60 hasta 15 empleados, además de adquirir sistemas de seguridad internas como cámaras de vigilancia y en otros casos policías privados.

Subrayaron que, en algunos casos, han sufrido amenazas por parte de quienes los obligan a pagarles las cuotas, así como el secuestro de algunos de los trabajadores, por lo que también se ven obligados a cubrir los rescates.