Como parte de las actividades de la cuaresma previo a la llegada de la Semana Santa, fieles católicos participaron en un viacrucis y misa desde una de las partes más altas de Acapulco, el cerro del Encinal, desde donde pidieron por la conversión de quienes hacen mal y abonan a la violencia.
El día de ayer a las nueve de la mañana, un grupo de fieles católicos acudieron al mencionado lugar, santuario de la imagen del Cristo Rey de la Paz, la cual mide seis metros de altura y tiene una vista panorámica de toda la bahía del puerto.
Juan Carlos Flores Rivas, párroco del barrio de Tambuco y uno de los principales impulsores del espacio religioso ubicado en la parte alta de la comunidad de Carabalí, informó que estas celebraciones inician cuatro sábados antes de la pasión y muerte de Jesucristo, en donde se busca la reconciliación entre los ciudadanos.
“El encinal es un lugar de esparcimiento, de paz y los invitamos. Desde que se creó este monumento en el 2009 ya estábamos viviendo esta espiral de violencia que se ha ido incrementando y que mejor mensaje que Cristo que vino a dar su vida por todos, nadie más tiene que morir, que nos convoca a la paz, a la reconciliación, al respecto a los derechos humanos de manera que todo está puesto por ese lugar tan especial”, dijo.
Agregó que, en estos días la carretera que conduce hasta el punto donde se encuentra el cristo, está en buenas condiciones para que los automóviles puedan subir o quienes no cuenten con carro propio pueden hacerlo a través del transporte público, por lo que invitó a todos los creyentes para acudir el próximo sábado a las nueve de la mañana para ser partícipes “del encuentro con Dios y con la naturaleza”.