Conocida mundialmente por la puesta de sol la mayoría de los 365 días del año, Pie de la Cuesta, es una zona turística de Acapulco que no ha sido explotada al 100 por ciento a pesar de que se cuenta con mar, lagunas y ríos en su colindancia con el municipio de Coyuca de Benítez.
La zona, cuenta con enormes fracciones de terreno en los que podrían edificarse desde algunos centros comerciales, hospitales, así como diversos negocios que atraerían inversión nacional y extranjera, además de fuentes de empleo para los lugareños de por lo menos, unas 60 colonias de esta zona poniente de la ciudad.
Según los propios empresarios de la industria restaurantera y hotelera de Pie de la Cuesta, considerada como la mejor ventana turística para disfrutar de la puesta del sol en Acapulco, está zona no sólo cuenta con una majestuosa playa, arena y ambiente, sino también con una enorme laguna que es otro de los principales atractivos que se podrían considerar, para iniciar con una planeación turística de primer mundo.
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La presidenta de la asociación de restauranteros y hoteleros de Pie de la Cuesta, María Nelly Cienfuegos, aseguró que este lugar ubicado a menos de seis kilómetros de la zona turística de Acapulco, es un sitio donde desafortunadamente las autoridades de gobierno no han dado un gran apoyo para sobresalir en la principal actividad económica de miles de familias que viven es la zona poniente.
“Tenemos todo en Pie de la Cuesta para ser mejor turísticamente que la zona Diamante, donde se destina por parte de las autoridades todo el potencial para traer grandes inversiones, implementar buenos servicios públicos, además de eventos de impacto internacional como conciertos, deportivos y de toda naturaleza, acciones que hacen falta en la zona poniente, donde se podría tener un detonante mundial que se promoviera la inversión de grandes consorcios turísticos como hoteles, centros comerciales, fraccionamientos de lujo, así como servicios eficientes que desafortunadamente no se tienen y esto puede ser una de las desventajas”, aseguró la también empresaria.
Manifestó que Pie de la Cuesta, es una zona bien planeada donde no se registran las inundaciones de negocios, ni de viviendas como ha sucedido en varias ocasiones por la mala planeación que se tiene en la Diamante de Acapulco, donde hay grandes empresas hoteleras consideradas como de gran turismo, grandes centros comerciales selectos y zonas residenciales en los que destacan condóminos y fraccionamientos.
María Nelly Cienfuegos, agregó que, en Pie de la Cuesta, se tienen estudios de factibilidad turística y de impacto ambiental, realizado por la Universidad Autónoma de Guerrero, en los que se determina que hay condiciones para convertir esta zona en una potencia turística, superior a la Diamante donde en los últimos años se ha destinado toda la mirada por parte de las autoridades de los tres niveles de gobierno.
Por su parte el empresario Joel Castillo Gómez, dijo que, si hay dinero para invertir en promoción, programas y proyectos turísticos, Pie de la Cuesta dejaría de ser una zona turística más de Acapulco.
“Tenemos lo que se requiere para ser una zona turística de mayor calidad, hay atractivos importantes que llaman la atención de los turistas y propios acapulqueños, como la playa, primeramente, la laguna, sus islas, la puesta del sol, además de todos los servicios turísticos requeridos, así como predios para extender servicios de primer nivel como hospitales, grandes imperios hoteleros y negocios como plazas comerciales, tiendas de autoservicios”, expresó.
Castillo Gómez, reconoció que, si hacen falta cosas que mantienen a Pie de la Cuesta como una zona de turismo de fin de semana, como los malos servicios públicos como alumbrado, recolección de basura, saneamiento de las aguas negras, drenajes en colonias, así como programas de impacto como los que se realizan en la zona Diamante.
Actualmente en Pie de la Cuesta, se tienen poco más de 50 negocios, entre estos 16 pequeños hoteles que pagan su tres por ciento del impuesto al hospedaje y que no se ve esta inversión en beneficio turístico para esta área del puerto, además de estos, hay 40 restaurantes que en temporada bajas de turismo sufren las consecuencias de una crisis económica por la falta de ingresos.
