La delegada de derechos humanos en Acapulco, Fanny Ruth Lara Figueroa , aseguró que pese al confinamiento ocasionado por la pandemia del Covid-19, la quejas por violación a los derechos humanos de los acapulqueños se mantienen en ascenso.

Señaló que hasta este mes de noviembre, la delegación a su cargo tiene un registro de 158 quejas iniciadas por diferentes causas entre personas del Sector Salud por falta de medicamentos y en contra funcionarios del gobierno municipal y del estado.

Además de algunas otras que se han iniciado por padres de familias que acusan a directivos y maestros de escuelas de retenerles documentos de sus hijos para cambiarlos de escuela o porque se van a vivir a otras ciudades.

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"Lamentablemente siguen llegando a las quejas, lo más viable sería que en el mes de diciembre no se presentara ninguna, pero los problemas siguen", expresó.

En su declaración Lara Figueroa destacó que en estos meses no se ha presentado queja alguna por el tema del bullying en contra de menores de edad en las instituciones educativas.

Sin precisar cifras, dijo que el año pasado se cerró con menos de 200 quejas debido a que la pandemia obligó a tener un proceso laboral fuera de las empresas , además de no haber tenido clases presenciales en las escuelas a nivel estado.