El Episcopado Mexicano, externó su preocupación por la creciente violencia, inseguridad, secuestros y drogadicción que se registra en diversos municipios de Guerrero, y llamó a la sociedad civil a sumarse a conversatorios y foros de participación para disminuir la problemática.

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En un comunicado enviado por la Arquidiócesis de Acapulco se destacó que los tiempos actuales son complejos y desafiantes.

“Nos preocupan la pobreza creciente y la destrucción del medio ambiente; la inseguridad y la violencia; el narcotráfico y la drogadicción; las extorsiones y los secuestros; los feminicidios y los miles de desaparecidos”.

Así también señalaron los desplazamientos forzados de tantos migrantes, quienes mencionaron han buscado una vida mejor, atravesando el territorio nacional convertidos, en mercancía humana, así como las amenazas a la democracia, la libertad religiosa y de expresión, se lee en la misiva.

Mencionaron que el Papa Francisco propuso que no se trabaje de manera aislada, sino que se haga un trabajo de respuesta conjunta con las familias e involucrando a las comunidades, escuelas, instituciones comunitarias, comunidades políticas, las estructuras de seguridad, ya que solo de esa manera “se podrá liberar totalmente de las aguas en las cuales lamentablemente se ahogan tantas vidas”, concluyó el comunicado.