Gustavo Torres Blanco, maestro en Administración de negocios y certificado en análisis de riesgo, cuestionó la lentitud con la que actuaron los tres niveles de gobierno para prevenir a tiempo el impacto del huracán Otis que devastó a Acapulco.
Al presentar la ponencia “La administración de riesgos y la mitigación de daños”, en la sesión de grupo ACA, consideró que la secretaría de Gestión Integral de Riesgos de Protección Civil no realizó los protocolos de atención del antes, durante y después del meteoro, así como la prevención con el combate y mitigación de riesgos y periodo de recuperación.
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Cuestiono que el huracán no podía evitarse, pero sí sus consecuencias y con ello mitigar el impacto que devastó al puerto e indicó que el tema “lo han cerrado en decir es que avisamos no es un manejo de boletines, para eso está el sistema meteorológico”.
“Tenían que haber previsto y la primera obligación del gobierno es garantizar la vida y seguridad de los ciudadanos lo primero que debieron hacer era cerrar el puerto a la navegación para proteger su vida, usando la fuerza pública, proteger las farmacias, hospitales porque dónde iban a ir los heridos, debieron haber mandado plantas de luz, que llegarán los medicamentos necesarios para los crónicos degenerativos”, dijo.
Torres Blanco destacó que si ya se tenía conocimiento del impacto las autoridades federales y estatales debieron haber trasladado equipo, herramienta necesaria y personal al puerto para responder de inmediato y de esa manera la recuperación hubiese sido más rápida.
“Hubo omisiones muy grandes de los 3 niveles de gobierno y se debe aplicar juicio político a los que marca la ley, a la gobernadora, a la presidenta municipal, el presidente no puede porque no está en la constitución, a los propios diputados que se negaron a dar recursos, a instituciones juicios civiles por daños provocados por su negligencia porque algunos son responsables de homicidios culposos”, opinó.
Agregó que la sociedad civil debe exigir al gobierno que se apliquen sanciones debido a que, sino ese tipo de cosas se va a repetir, aunado a los actos de rapiña ya que también continuarán como pasó cuando fue Ingrid y Manuel.
El experto en análisis de riesgo mencionó que también otro factor importante es “quitar a la gente” que habita en zonas de peligrosidad, o evitar se acentúen ahí.
Finalizó que se debe considerar rehacer esas escalas ya que esa rebasó por mucho, debido a que analistas internacionales reportaron vientos de más de 330 kilómetros por hora, “seguramente categoría 5 quedó muy bajo”, concluyó.
