Luego de recibir llamadas de amenazas e intento de secuestro, cientos de maestros de diversos plantes de secundaria, primaria y preescolar de las zonas de Llano Largo, Puerto Marqués, La Sabana, Renacimiento y Emiliano Zapata, acordaron adelantar el periodo vacacional de fin de año y aseguraron que darán clases hasta el día viernes 30 de noviembre.
Los docentes involucrados se reunieron ayer en cada uno de sus planteles y tomaron la decisión de adelantar 19 días el periodo vacacional y así evitar ser víctimas de la delincuencia que los acosa, sobre todo cuando se acerca el cobro de la primera parte de su aguinaldo.
Cabe mencionar que este ciclo escolar 2018–2019, está programado para concluir el 10 de julio del próximo año, por lo que se deben de cumplir un total de 195 días de clases, situación que no se cumplirá en Acapulco tras esta decisión de los profesores que no ha sido consensada con padres de familia y mucho menos con las autoridades educativas.
El argumento de los profesores, quienes se negaron a proporcionar sus nombres, es que durante la semana pasada estuvieron recibiendo llamadas a sus celulares, donde los amenazaron y les pidieron la mitad de sus aguinaldos, de lo contrario atentarían contra sus vidas, incluso en algunos planteles dejaron cartulinas pegadas o ingresaron para llevar a cabo las advertencias.
Cabe mencionar que la semana pasada el secretario de Educación, José Luis González de la Vega Otero, declaró que no se adelantarían las vacaciones y se negó a revelar por seguridad las fechas en que se les depositará el aguinaldo a los profesores, precisamente para evitar que fueran extorsionados, situación que según los maestros fue inevitable.
“No hay garantías de seguridad para nosotros en estas colonias peligrosas, hemos acordado todas las escuelas de esta zona adelantar el periodo vacacional, vamos a estar trabajando hasta el día viernes 30 de noviembre, preferimos arriesgarnos a una sanción que arriesgar nuestra vida con estas personas que nos amenazan”, explicó uno de los profesores inconformes.
Aseguraron que la vigilancia del Ejército y la Policía estatal sí ayuda a disminuir los delitos a los alrededores de los planteles, sin embargo, el acoso y la extorsión vía telefónica de los delincuentes sigue en aumento, incluso las personas que les marcan conocen sus vehículos, y la manera en la que se desplazan a las escuelas, por lo que temen de ser víctimas porque piensen que van a recibir mucho dinero de aguinaldo.