Los vecinos de la Unidad Habitacional El Coloso, no solo tienen que caminar entre aguas negras, ahora hay un serio riesgo de una emergencia sanitaria por la basura.

A pesar del operativo policíaco que se implementó para que no se arroje la basura a cielo abierto, hay un tiradero que prácticamente cerró una calle que sale a la avenida la Gran Vía.

Son cerros de basura que se han acumulado y que diariamente desprenden un fétido olor, pero esto no ha sido impedimento para que se sigan arrojando desechos de todo tipo.

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A metros de distancia, se encuentra un enorme charco de aguas negras que escurren desde la parte alta de la Gran Vía, debido a que se azolvó una alcantarilla desde el paso del huracán Otis.

Un vecino del lugar Carlos Coria, denunció que en este punto llegan los llamados pechugueros y arrojan ahí la basura que recogen en los edificios en donde por no pasar el camión recolector, los contratan para recoger sus desechos.

Lo grave es que ya hay un brote de enfermedades de las vías respiratorias, al margen del incremento de casos de dengue, que es otro padecimiento que está sin control.

Reprochó que la avioneta fumigadora nunca cruzó sobre la Unidad Habitacional y tampoco se han visto las brigadas de fumigación de que tanto presumen los funcionarios del sector salud.