Ciudadanos han comenzado a retomar los domingos familiares con actividades de gastronomía y recreación acudiendo a los diferentes centros de consumo que ya se encuentran abiertos desde hace más de 3 semanas.
Son largas las filas las que se hacen para poder comprar el delicioso platillo guerrerense; relleno de cerdo y de pollo, qué decir del chilate y de la barbacoa de res y chivo que son de las preferidas por los comensales que acuden en el mercado de la Progreso.
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"Antes de Otis yo venía cada quince o 20 días por mi bolillo de pollo y puerco, hoy otra vez aquí estoy" dijo con una gran sonrisa, el señor Carlos quien esperaba en la fila su platillo favorito.
Algunos compran los alimentos para llevar y degustarlos en su hogar, otros más aprovechan los espacios para deleitarse con variedad de comidas que ofrece ese centro de abasto.
Los pasillos del mercado son abarrotados por decenas de ciudadanos y turistas ante la apertura de la totalidad de los locales de este sitio tradicional ubicado en una de las colonias más populares del puerto.
