Con su caja de chicles en la mano, Neymar, de escasos 5 años de edad, busca clientes sobre la franja costera Miguel Alemán, ajeno al inclemente sol.
Acompañado de su abuelita, con cierto temor y pena, se acerca a ofrecer su mercancía y sin insistir cuando le dicen no, de inmediato se retira.
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Pero se arma de nuevo de valor y con timidez vuelve a la carga, hasta que finalmente le compran y su rostro se le ve contento.
-¿Cómo te va con la venta, amiguito?
Bien, ya vendí a ese señor.
-¿Qué te trajo Santa Claus?
Nada. Mi abuelita me trajo una patineta, pero no la puedo jugar porque vendo chicles.
-¿Y cómo te va con la venta?
Pues, a veces compran y otras no.
-¿Ya hiciste tu carta a los Reyes?
No se escribir.
-¿Pero ya sabes qué juguete quieres?
No, ya tengo mi patineta
Enseguida se retira y se acerca a otra mesa a seguir ofreciendo sus chicles, poniendo fin al intento de entrevista.