Los desechos sólidos de la construcción se volverán un peligro eminente durante la temporada de lluvias, debido a que éstos llegan a los cauces pluviales sin que se regule su destino, aseguró el presidente de la Comunidad Politécnica en Acapulco, José Luis Sánchez Ortiz, quien agregó que es necesaria la creación de tiraderos oficiales para evitarlo.
En entrevista, el ingeniero de profesión aseveró que los desechos de la construcción son manejados de manera libre por los chóferes de los camiones de volteo, quienes los arrojan en calles, laderas y linderos de cauces pluviales.
"Cuando alguien hace una obra, por pequeña que está sea, al final produce desechos y ese desecho se carga a un camión volteo y el chofer decide dónde lo tira; si está rumbo a Pie de la Cuesta lo tira en los acantilados, si está en Diamante lo tira allá en los linderos del río de La Sabana y cuando llueve el agua arrastra todo eso, lo mete al río, lo azolva y viene la inundación ", señaló.
Agregó que en el municipio deben existir por lo menos tres tiraderos, los cuales tienen que contar con las especificaciones técnicas y de infraestructura para recibir un gran tonelaje de desechos producto de construcción o excavación, sin que tengan efectos secundarios.
Sánchez Ortiz puntualizó que los tiraderos tienen que ser sustentables y en ellos se tiene que dar un tratamiento especial para que el escombro pueda tener un uso y regrese a ser funcional.