Yeso, barro y más de siete horas dan vida a tradicional nacimiento

Más de siete horas de trabajo y 150 figuras de yeso, barro y porcelana, utiliza la familia Ricardi Añorve para continuar con esta tradición iniciada hace 24 años

Heidi Nieves | El Sol de Acapulco

  · lunes 25 de diciembre de 2023

Nacimiento terminado después de siete horas de trabajo. / Foto: Heidi Nieves | El Sol de Acapulco

Más de siete horas invirtieron integrantes de la familia Ricardi Añorve para colocar el nacimiento del niño Dios en donde se utilizaron elementos de la naturaleza para poner los detalles y engalanarlo.

Son más de 150 las figuras de porcelana, yeso y barro las que lucen sobre el heno, lago y desierto, algunas com más de 24 años de antigüedad y otras adquiridas con el paso del tiempo.

Isaac hermano mayor de tres varones con ayuda de su esposa, hermanos y cuñadas es quien tiene la iniciativa de poner año con año en el restaurante familiar el nacimiento y dónde sobre sale cada ingenio y creatividad para mejorarlo con el tiempo.

Este 2023 colocó una cascada con un puente, elaborada con estructura de unicel, con una cobertura de espuma de poliuretano, y pintura vinílica, así como una manguera y pequeño motor eléctrico, la cual colocó en una de las esquinas.

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El nacimiento tiene las figuras de la Virgen María, José, el Niño Dios, los Reyes Magos, un mercadito, una cascada con un puente, un lago, desierto, palmas, pastores, casitas, animales como asnos, cerdos, vacas, ovejas, un camello, un elefante y un caballo, musgo, heno, todos bajo un gran pino de Navidad decorado con esferas rojas y doradas.

Para Isaac Ricardi poner el nacimiento lo remonta a su infancia con etapas más felices de su vida, el esperar al niño Jesús con los regalos de Navidad y de Reyes Magos.

Heno y musgo completan la escenificación con las figuras. / Foto: Heidi Nieves | El Sol de Acapulco

“Desde que percibo ese olor al momento de desenvolver las piezas, al esparcir el heno, ese olor tan peculiar, me remonta a las etapas más felices de mi vida, al esperar al niño Jesús con los regalos, era un momento tan emocionante, recuerdo mi inocencia y sobre todo la esperanza”.

El primer nacimiento que colocó fue cuando tenía 16 años y por más de 2 décadas continúa poniéndolo en diferentes partes del restaurante así como en el patio de la casa paterna.

Típico nacimiento en una casa de Acapulco, Guerrero. En Navidad, es una tradición montar este tipo de pesebres para acostar al Niño Dios en la noche del 24 de diciembre. / Foto: Itzel Morales | El Sol de Acapulco

Son más de 10 cajas de plástico y cartón donde por más de 9 meses guarda su madre las figuras, las cuales en su mayoría son de gran costo y que también con el tiempo han sufrido afectaciones tras ser tiradas por algunos curiosos que disfrutan admirarlo así como traviesos mininos.

“Las piezas son caras, por eso se destina un cierto presupuesto cada vez que se adquieren, comprando alrededor de 10 u 8 piezas, algunas se tratan de reparar con pegamentos especiales”.

Los investigadores afirmaron que fue San Francisco de Asís quien concibió la idea de poner lo que hoy se conoce como Nacimiento. En los primeros años, los nacimientos navideños estaba conformado por un grupo de personas que reproducían en vivo la “adoración de los pastores”.