La manera en la que el profesor Oliver Castro Jiménez imparte su clase, ha asombrado a personas de todo el mundo, pues es a través de anime y dibujos como enseña a adolescentes sobre Física, una materia que a para muchos es un dolor de cabeza.
Nació en Puerto Escondido, Oaxaca, pero se considera como un chilpancingueño más; toda su vida estudió en escuelas públicas y terminó la carrera de Ingeniería Civil por el Instituto Tecnológico de Chilpancingo (ITCH).
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Lleva casi 10 años impartiendo clases en una escuela privada, donde regularmente los padres optan por inscribir a sus hijos adolescentes para que tomen cursos de regularización, así como para prepararse para exámenes de admisión en universidades.
Mencionó que la idea de dar clases se dio por “hambre” al no encontrar un trabajo, pero conforme paso el tiempo, tuvo la idea de innovar la forma de dar clases, para hacer del conocimiento una tema divertido y no tedioso.
Comenzó a usar el anime para explicar algunos conceptos físicos como espacio, tiempo, masa, y lo hizo pensando en diferenciarse de otros maestros, y de dar un plus a la institución que representa, pues asegura que hay mucha competencia entre escuelas.
Comenzó con algunos dibujos, pero de ahí, el anime que lo catapultó fue el de One Piece, una obra japonesa que narra las aventuras de un joven llamado Monkey D. Luffy, en su búsqueda por convertirse en el rey de los piratas.
A raíz de estos dibujos, “el profe Oliver”, como le dicen sus alumnos, comenzó a observar que estos ponían más atención a las clases, y lograban interesarse por la clase.
Para él, la forma en que se imparten clases or parte de los maestros tiene que cambiar e implementarse nuevas formas para que los jovenes se interesen por el aprendizaje, en vez de alejarlos.
Para complementar su labor también subía videos a redes sociales en los que daba clases, sin embargo, todo cambio cuando sus dibujos se viralizaron en redes sociales.
Lo que hacia para mejorar el aprendizaje entre sus alumnos se ha conocido en Estados Unidos, España, Alemania, Japón y Brasil, por decir algunos, e incluso a raíz de la popularidad, han habitado escuelas de otros estados las que le han ofrecido trabajo.
Se dice asustado por haberse compartido en un personaje viral, pues asegura que su fotografía circulada por la red, y que sus perfiles de redes sociales pasaron de cuantos cuantos a miles.
Aún cuando es toda una celebridad en las redes sociales, curiosamente en el estado o en la ciudad, poco se ha sabido de su peculiar forma de enseñar.
