Bandai ha recuperado el mítico Tamagotchi con nuevas funcionalidades, integrando por primera vez una cámara, para que los niños puedan fotografiarse, pero también cocinar y explorar el mundo con su mascota virtual, y encontrar nuevos amigos con los que jugar y compartir regalos.
Casi 25 años después de su primer lanzamiento en el mercado y con más de 82 millones de unidades vendidas en todo el mundo, la compañía japonesa ha presentado este novedoso dispositivo.
Tamagotchi Pix mantiene la forma de huevo con la que se dio a conocer el primer Tamagotchi en los años 90 y tres botones, ahora táctiles, con los que alimentar y cuidar a la mascota virtual en una pantalla a color.
Ahora, la compañía ha mejorado las opciones de juego para potenciar la interacción y las funcionalidades, adaptadas a las nuevas demandas del público infantil.
Con el nuevo dispositivo se introduce la posibilidad de pintar, cocinar junto con este compañero virtual o de moverse por el mundo real para descubrir y conocer nuevos amigos Tamagotchi. Esto es posible gracias a que incorpora por primera vez una cámara, con la que los usuarios podrán sacarse fotografías y guardarlas como recuerdo de sus aventuras en un canal social propio e integrado.
La forma en que se eduque a Tamagotchi sigue siendo importante, ya que afectará la jugabilidad de una manera completamente nueva con la configuración de salas personales o determinando la futura profesión de la mascota cuando regrese a su planeta.
Tamagotchi Pix no necesita conexión a Internet, y permite conectarse con el Tamagotchi de un amigo mediante un código QR, para jugar juntos y enviarle regalos. A partir de agosto, además, permitirá conectarse 'online' para ampliar la experiencia con nuevas misiones, objetos y regalos.
El nuevo Tamagotchi puede configurarse en varios idiomas, incluido el castellano, y ya está disponible en preventa, en dos colores: rosa y morado, por 59,99 euros. Llegará a las jugueterías y grandes superficies a finales del mes de mayo.