La señora Caritina Vázquez Martínez por más de 30 años se ha dedicado a la reparación de calzado, bolsas y cinturones, oficio que le “gusta mucho” realizar además de obtener ganancias para llevar el sustento económico a su hogar.
Con una excelente vista a pesar de sus más de 65 años trabaja más de 8 horas, algunas veces sentada por largas horas y otras más de pie.
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Acompañada en su taller por gatitos, ella cose, pega y remienda los zapatos de sus clientes que casi a diariamente le llevan, quienes a veces le dejan buenas ganancias y otras veces nada.
“En días buenos me gano como 600 pesos diariamente y en otros de plano en ceros me voy, arreglo parejo zapatos de mujer y caballero, no hay de uno demás”.
El negocio de doña Caritina se ubica sobre la carretera Acapulco-México a la altura de la parada de camiones “Llave de Agua”.
Sus principales herramientas de trabajo, son agujas, hilos, pegamentos, pinturas, entre máquinas de coser las cuales con sus manos hace hasta lo imposible por dejarlos como nuevos.
La comerciante narró que en algunas ocasiones hay clientes que olvidan sus calzados por muchos meses, lo cual le causaba pérdidas económicas pues invertía en su reparación y ya no regresaban por ellos.
“Ahora cuando me los dejan les pido que me los dejen pagados porque sino yo pierdo, y así están obligados a pasar”.