Es el deporte más antiguo del mundo y Acapulco es semillero de grandes gladiadores. Y es en este día 21 de septiembre que se celebra el Día Nacional de la Lucha Libre.
Enighma es un luchador enmascarado del bando rudo, lleva más de 10 años combatiendo profesionalmente en las mejores arenas de Guerrero y la Ciudad de México, enfrentándose a luchadores de estirpe como Mr Niebla, Pagano, Sanson, Cuatrero, Forastero, Másscara Sagrada, Mísstiko, Huracán Ramírez y Penta OM.
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Todo inició cuando su padre lo llevaba de niño a presenciar combates a la Arena Coliseo de Acapulco, ubicada en la calle Tadeo Arredondo en la colonia Centro. “No faltaba a las funciones y dije algún día quiero estar ahí y pues se me dio ese sueño”.
Su gusto y compromiso con el deporte de los encordados lo llevó a entrenar hasta debutar a los 19 años como profesional.
Cada fin de semana muestra su talento en funciones dominicales que se realizan en la Unidad Deportiva de Renacimiento "Jorge Campos" y en la "Vicente Suárez", así como en el grupo que pertenece Promociones Nova la cual funciona como escuela de lucha libre desde hace 4 años ubicada en el punto conocido como "Siete Esquinas".
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Ser gladiador tiene un precio y lo ha llevado a sufrir lesiones, como esguinces en los dos tobillos, molestia en la toda espalda en específico la parte baja, ya que hacer un deporte de alto rendimiento, si no está el cuerpo bien preparado, puede sufrir algún tipo de desgaste o lesión.
“Es un deporte de algo riesgo que sino no estás bien preparado y no entrenas como debe ser, te lleva a una lesión grave como ruptura de hueso, para ser luchador debes estar loco”.
Pese a ser un deporte demandante ha desarrollado su vida de manera normal, es prestador de servicios turísticos en la zona Diamante de Acapulco, y su esposa a quien conoció en el ambiente luchistico, apoya su pasión, así como su familia, sin embargo, en un inicio su padre quería que se dedicara al fútbol.
El deporte de las llaves cada día despierta interés en nuevas generaciones, lanzando en corto tiempo a luchadores profesionales con nuevas bases para hacer de ellos nuevos ídolos locales.
Las bases de la lucha libre data de los antepasados y se le conocía como la lucha grecorromana, lucha Inter colegial u olímpica.
Salvador Luteroth, considerado como el Padre de la Lucha Libre en México, fue quien tuvo la visión de traer ese espectáculo, que solo se daba en Estados Unidos y zonas fronterizas, creando la Arena México en 1933.
Es a través de las máscaras, capas, equipos llamativos y brillantes, los vuelos, el uso de las cuerdas es como se ha venido desarrollando y evolucionando el deporte del cuadrilátero.