Greenpeace realizó el lunes una protesta en el oceáno Pacífico contra la minería en el fondo marino, en la que el barco Rainbow Warrior de la organización ambiental persiguió a un buque que investigaba para DeepGreen, una compañía que planea extraer metales para baterías en las profundidades del mar.
Activistas de Greenpeace fueron fotografiados en botes de goma sosteniendo pancartas que decían "¡Detengan la minería en aguas profundas!", con el Maersk Launcher, un barco fletado por DeepGreen, de fondo.
La protesta tuvo lugar a 900 millas náuticas de la costa occidental de México, en la Zona Clarion Clipperton (CCZ), una gran franja de fondo marino donde abundan los nódulos del tamaño de una papa ricos en cobalto y otros metales usados en baterías, y donde DeepGreen tiene licencia de exploración.
"El fondo marino es uno de los ecosistemas menos comprendidos y explorados de la Tierra, que alberga una importante biodiversidad y también actúa como sumidero vital de carbono", dijo Greenpeace en un comunicado.
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Un portavoz de DeepGreen dijo que la compañía estaba agradecida de que Greenpeace viniera a ver una investigación que, según dijo, era realizada por científicos independientes.
"Tenemos un objetivo compartido de hacer la transición a un mundo impulsado por energía 100% renovable, pero a diferencia de Greenpeace tenemos un plan viable para llegar allí con respecto a las materias primas necesarias", agregó en un correo electrónico.
DeepGreen afirma que la minería en aguas profundas será más sostenible que la actividad en tierra. Greenpeace dice que la minería en el fondo marino no es necesaria para impulsar la transición energética, especialmente si los gobiernos se comprometen con la eficiencia de los recursos y una economía circular.
La oposición a la minería en aguas profundas está creciendo. La semana pasada, la automotriz BMW, Volvo Group, el fabricante de baterías Samsung SDI y la compañía de tecnología Google firmaron un llamado al World Wildlife Fund para una moratoria sobre la práctica.
En una carta abierta a esas compañías, DeepGreen dijo que el abastecimiento de metales para baterías de nódulos de aguas profundas generará "cero residuos sólidos, sin relaves tóxicos y una fracción de las emisiones de carbono en comparación con las fuentes basadas en tierra".