Pobladores de la Sierra del municipio de Atoyac de Álvarez reportaron la muerte de un jaguar y se sumaron a la exigencias de que esto hecho se investigue.

El hallazgo se realizó muy cerca de la localidad de Río Chiquito, perteneciente al municipio de Atoyac de Álvarez, en la Costa Grande de Guerrero.

Fue en Facebook donde se dio a conocer el hecho, y rápidamente se propagó por varias redes sociales.

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En 2023, la organización internacional Wild Felids Conservation estimó a raíz de un monitoreo que en la zona serrana de la entidad, había unos 113 ejemplares de Jaguares.

El biólogo Fernando Ruíz, quien ha liderado estos monitoreos en algunos municipio como Tecpan de Galeana y recientemente en Chilpancingo, condenó estos hechos.

Indicó en redes sociales que se trataba de una hembra “que ya no tendrá descendientes, cada día se reduce el hábitat disponible y se pierde el acervo genético de la especie”.

En septiembre pasado, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) dio a conocer que Guerrero había sido incluido para participar en el tercer Censo Nacional del Jaguar.