Hungría.- Con la primavera boreal y las vacunas contra el Covid-19 a la vista, el chocolatero húngaro Laszlo Rimoczi está enviando un mensaje de esperanza para la Pascua creando conejitos de chocolate con jeringas de inyecciones.
Rimoczi dijo que las jeringas, hechas de fino chocolate italiano y espolvoreadas con colorante comestible plateado, muestran que hay una salida a la pandemia del coronavirus.
A diferencia de sus Papá Noel de Navidad, los conejitos de Rimoczi no usan más mascarillas.
"No hay ningún relleno en las vacunas, es sólo chocolate italiano con leche o amargo 100% de buena calidad", dijo Rimoczi mientras moldeaba las vacunas de chocolate en su pequeño taller en Lajosmizse, 70 kilómetros al sur de Budapest.
El negocio de Rimoczi, que hace delicias de chocolate y las vende en una pequeña tienda en su casa, sufrió pérdidas por la pandemia el año pasado. Su mayor éxito fueron los Papá Noel con mascarillas.
"Para aquellos que piensen (...) que arruinaré el buen clima de los niños en la Semana Santa, puedo hacer conejitos sin jeringas como alternativa", agregó.
El chocolatero se ha registrado en el programa de vacunación del gobierno y espera recibir su verdadera inyección contra el Covid-19, pero lo hará cuando reciba la llamada de su médico de cabecera.
