Bar El Galeón, más de 2 siglos de la historia de Acapulco

El viejo inmueble que data del año 1800, fue testigo del surgimiento y auge de Acapulco como destino turístico y hoy permanece abandonado

Celso Castro | El Sol de Acapulco

  · miércoles 11 de enero de 2023

El bar “El Galeón”, es devoradO por el tiempo y nadie quiere rentarlo o comprarlo./ Foto: Abraham Martínez | El Sol de Acapulco

La vieja casona, la cual aún conserva un diseño colonial, donde funcionó el bar “El Galeón”, es devorada por el tiempo y nadie quiere rentarla, ante el temor de sufrir la misma suerte del último arrendatario, que fue asesinado a tiros en la entrada por hombres armados.

Aunque no existen registros sobre la construcción, la cual está ubicada sobre la calle María Iglesias de la colonia centro, a unos metros del zócalo y la costera Miguel Alemán, data de 1800, esto porque aún existe un madero de viejo cedro, con una inscripción que avala su antigüedad.

Según se dice, este viejo inmueble formaba parte de una casa que abarcaba toda la manzana, pero con el tiempo se fue seccionando hasta quedar la casona, donde como viejo testimonio de la opulencia aún se conserva un balcón y una fuente en el interior, con sus vigas y viejos maderos labrados a punta de hacha, que se resisten al tiempo.

El primer registro que existe es que se rentó para que funcionará como restaurante, con venta de cervezas y otras bebidas alcohólicas con los alimentos, los encargados le pusieron como razón social “Restaurante Guadalajara de Noche”.

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Sin embargo, la competencia era fuerte, porque a bajo de esa misma calle estaba el restaurante “Casa Blanca” y a unos metros el famoso “Bar del Puerto” y “Bar Chiquito”, ambos acaparaban la clientela. En aquel entonces eran en su mayoría empleados del ayuntamiento y de las sucursales bancarias cercanas.

Esto propició que fuera a la quiebra y cerró. Fue traspasado al empresario Amancio Sámano, quien tenía una amplia experiencia en el ramo por ser desde mesero a bar tender, heredando todo el mobiliario, aunque para poder operar requirió la licencia de funcionamiento por parte de la empresa cervecera “La Corona”, iniciando sus operaciones en 1889, como centro botanero.

En el 2009, empezaron los problemas internos en la vieja casona./ Foto: Abraham Martínez | El Sol de Acapulco

El nombre del bar El Galeón, surgió al calor de una reunión de amigos, en donde sugirió alguien de apellido Ordaz, que le pusiera ese nombre, pues sin pretenderlo habían mandado construir una embarcación de madero que colgaba del techo y fue así como le quedó este distintivo.

En sus inicios hubo altibajos, la competencia era fuerte con los bares que había en su entorno, pero esto no desanimo a Samano, quien, con la ayuda de sus hijos, innovo el concepto y contrató tecladistas, a cantantes como Biky Vera, Luz Elena, Paquita y el Zorro, entre otros.

El show fue variando, cuando los jueves se ofrecía pozole, fue cuando se presentaron caravanas de travesti y de comediantes de la talla del Tlahuica Jr., actualmente El Costeño y Charly buen Rostro, por citar algunos, hasta conjuntos musicales, pero la baja de turistas empezó a afectar la economía local.

Sin embargo, volvió el auge, cuando todos los miércoles de lucha libre, el lugar se llenaba de luchadores famosos del Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL), lo que atrajo a nueva clientela y volvieron a colocarse en la cima, sin abandonar su concepto de la música viva.

Fue así como transcurrieron los años, en el 2009, empezaron los problemas internos y la violencia detonó, por lo que tres años más tarde ya no fue posible sostener el negocio y la familia Samano, tuvo que traspasarlo, dejando una historia rica en anécdotas, entre las que hubo peleas campales.

La empresa Cervera rentó el lugar y ya no pudieron levantarlo, en virtud que le subieron el precio de la cerveza, que era el principal producto que generaba ganancias y los viejos clientes, buscaron lugares en donde el costo era más accesible, por lo que al final tuvieron que cerrar.

Este viejo inmueble formaba parte de una casa que abarcaba toda la manzana, pero con el tiempo se fue seccionando hasta quedar la casona./ Foto: Abraham Martínez | El Sol de Acapulco


Luego de año y medio sin abrir, nuevos concesionarios aceptaron el reto y aunque trataron de mantener el mismo concepto que le aplicó Amancio Sámano, iban pocas personas, pero no se rindieron y el encargado, salía a la puerta a invitar a la clientela a pasar al bar, fue así como el 5 de abril de 2019, fue atacado a balazos en la entrada del bar El Galeón, a las 19:00 horas.

Aunque fue atendido todavía por paramédicos de la Cruz Roja, murió a los pocos minutos, poniendo fin a la era del bar El Galeón, pues desde esa fecha nadie más se ha interesado en rentar la propiedad y actualmente es presa del polvo, la salinidad, la corrosión y el olvido.