Teniendo como fondo la bahía acapulqueña sobre la plataforma del club La Concha del afamado hotel Las Brisas se dio el saque y raquetazo inaugural del XXVII Abierto Mexicano de Tenis.
A la brillante cancha azul llegaron para dar el saque inicial y pelotear un doble, el alemán y favorito 2 Alexander Zverev, como 2 WTA, Sloane Stephens; el norteamericano John Isner como 5 de la siembra y la mexicana Renata Zarazúa quien llegó como invitada wild card y en la primera ronda tendrá como rival a la campeona 2018.
Tras el agradecimiento de Raúl Zurutuza por el respaldo del gobierno del estado a la edición 27 del AMT, les dio la bienvenida y el secretario de Turismo, Ernesto Rodríguez Escalona y el subsecretario Noé Peralta Herrera entregaron obsequios simbólicos de Guerrero.
Los cuatro agradecieron la hospitalidad de los guerrerenses y la oportunidad estar en la edición 27 de la ATP y la del 20 aniversario de la WTA en Acapulco.
“Es un gran torneo, en un lugar absolutamente increíble, es divertido estar acá, todos los jugadores disfrutamos mucho el tiempo aquí. Realmente se disfruta el tiempo acá; este año vine con mi familia”, comentó Isner en su sexta participación en Acapulco; el año pasado llegó a semifinales.
Zverev compartió la opinión de Isner, “siempre he dicho que la afición mexicana es muy apasionada” y Renata Zarazúa habló de la importancia de que los jugadores mexicanos aprovechen torneos de este nivel, “es una oportunidad para todos los mexicanos, es muy importante y una experiencia que tenemos que aprovechar”.