/ lunes 20 de mayo de 2024

Regresemos el seguro popular

En Guerrero, al igual que en muchas otras regiones del territorio nacional, las deficiencias del sistema de salud pública se han convertido en una dolorosa realidad para miles de personas que buscan atención.

La falta de medicamentos, equipo y personal capacitado ha llevado a situaciones críticas donde la vida de los pacientes se ve comprometida. Por ello, se ha acentuado la importancia de levantar la voz y exigir un cambio radical en nuestro sistema de salud.

La salud es un derecho fundamental de todo ser humano, consagrado en diversos instrumentos internacionales y en nuestra propia Constitución. Sin embargo, el acceso a servicios de salud de calidad sigue siendo un desafío para muchas personas en Guerrero, especialmente para aquellas que viven en comunidades marginadas o remotas.

En esta coyuntura, resulta vital reconocer que el acceso a medicamentos es un componente esencial de la atención médica y que su falta puede tener graves consecuencias para la salud de las personas.

Sin embargo, ha sido preocupante el golpe que se dio al sistema de salud con la desaparición del Seguro Popular, dejando a muchas familias sin protección y exacerbando la crisis en nuestros hospitales.

No podemos seguir aceptando excusas ni justificaciones por la falta de medicamentos y recursos en nuestros hospitales. La incompetencia de las autoridades de salud y la falta de gestión eficaz han llevado a una crisis que ya no podemos ignorar. Es hora de asumir la responsabilidad y tomar medidas concretas para resolver esta situación.

Promesas vacías e irreales han sido la constante durante demasiado tiempo. Hoy nos enfrentamos a una crisis de salud que afecta a miles de familias en Guerrero. Ya es suficiente. Necesitamos un sistema de salud eficaz que garantice el acceso a medicamentos y atención médica de calidad para todos los ciudadanos, sin excepción.

Por ello, es imperativo que las autoridades tomen medidas urgentes para garantizar el abasto de medicamentos en Guerrero y en todo el país. Esto incluye la implementación de políticas y programas que aseguren la disponibilidad de medicamentos esenciales en los centros de salud y hospitales, así como la adopción de medidas para prevenir la corrupción y el desvío de recursos que han afectado históricamente al sistema de salud.

Asimismo, es necesario reestablecer un sistema de salud que realmente atienda las necesidades de la población, con un enfoque en la prevención y la atención primaria de la salud. Esto incluye la promoción de estilos de vida saludables, la atención integral de enfermedades crónicas y la mejora de la infraestructura y equipamiento de los centros de salud y hospitales.

La situación actual de los hospitales desabastecidos en Guerrero es inaceptable. No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras nuestros seres queridos sufren y mueren por falta de atención médica adecuada. Exigimos un sistema de salud eficaz que cumpla con su deber de proteger y cuidar a todos los ciudadanos. El tiempo de las excusas ha terminado. Es hora de actuar.

En Guerrero, al igual que en muchas otras regiones del territorio nacional, las deficiencias del sistema de salud pública se han convertido en una dolorosa realidad para miles de personas que buscan atención.

La falta de medicamentos, equipo y personal capacitado ha llevado a situaciones críticas donde la vida de los pacientes se ve comprometida. Por ello, se ha acentuado la importancia de levantar la voz y exigir un cambio radical en nuestro sistema de salud.

La salud es un derecho fundamental de todo ser humano, consagrado en diversos instrumentos internacionales y en nuestra propia Constitución. Sin embargo, el acceso a servicios de salud de calidad sigue siendo un desafío para muchas personas en Guerrero, especialmente para aquellas que viven en comunidades marginadas o remotas.

En esta coyuntura, resulta vital reconocer que el acceso a medicamentos es un componente esencial de la atención médica y que su falta puede tener graves consecuencias para la salud de las personas.

Sin embargo, ha sido preocupante el golpe que se dio al sistema de salud con la desaparición del Seguro Popular, dejando a muchas familias sin protección y exacerbando la crisis en nuestros hospitales.

No podemos seguir aceptando excusas ni justificaciones por la falta de medicamentos y recursos en nuestros hospitales. La incompetencia de las autoridades de salud y la falta de gestión eficaz han llevado a una crisis que ya no podemos ignorar. Es hora de asumir la responsabilidad y tomar medidas concretas para resolver esta situación.

Promesas vacías e irreales han sido la constante durante demasiado tiempo. Hoy nos enfrentamos a una crisis de salud que afecta a miles de familias en Guerrero. Ya es suficiente. Necesitamos un sistema de salud eficaz que garantice el acceso a medicamentos y atención médica de calidad para todos los ciudadanos, sin excepción.

Por ello, es imperativo que las autoridades tomen medidas urgentes para garantizar el abasto de medicamentos en Guerrero y en todo el país. Esto incluye la implementación de políticas y programas que aseguren la disponibilidad de medicamentos esenciales en los centros de salud y hospitales, así como la adopción de medidas para prevenir la corrupción y el desvío de recursos que han afectado históricamente al sistema de salud.

Asimismo, es necesario reestablecer un sistema de salud que realmente atienda las necesidades de la población, con un enfoque en la prevención y la atención primaria de la salud. Esto incluye la promoción de estilos de vida saludables, la atención integral de enfermedades crónicas y la mejora de la infraestructura y equipamiento de los centros de salud y hospitales.

La situación actual de los hospitales desabastecidos en Guerrero es inaceptable. No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras nuestros seres queridos sufren y mueren por falta de atención médica adecuada. Exigimos un sistema de salud eficaz que cumpla con su deber de proteger y cuidar a todos los ciudadanos. El tiempo de las excusas ha terminado. Es hora de actuar.