/ martes 15 de octubre de 2024

Evelyn ha superado tempestades

No debe olvidarse. El tercer año de Evelyn Salgado como la primera gobernadora de Guerrero inició y concluyó atendiendo los estragos de dos de los peores huracanes en la historia del estado.

El 24 de octubre de 2023, apenas a unos días de cumplir su segundo año de gobierno, le tocó enfrentar los estragos del huracán más devastador de la historia del puerto. Otis con sus extraordinarios vientos hizo lo que ningún otro huracán: Destruyó toda la planta productiva de Acapulco, desde hoteles, restaurantes, comercios, incluso hundió la flota de embarcaciones de pesca deportiva y yates recreativos, además de damnificar casi la totalidad de las viviendas y afectar todos los servicios públicos.

En septiembre de 2024, unas semanas antes de cumplir su tercer año al frente de Guerrero, el huracán John derramó cantidades históricas de agua durante un periodo prolongado de tiempo, ocasionando deslaves, inundaciones y afectaciones carreteras que incomunicaron y afectaron a muchos guerrerenses en ambas costas, Acapulco, Chilpancingo y la Montaña.

Evelyn Salgado no solo es la mujer que rompió el llamado techo de cristal en el estado al ser la primera gobernadora guerrerense, también le tocó encabezar la reconstrucción y reactivación económica más grande en la historia de la ciudad más importante del estado por su tamaño, su generación de empleo y Producto Interno Bruto, así como su fama internacional.

Y cuando estábamos en eso John se convirtió en la cereza del pastel.

Pero en ambos casos se vio a una gobernadora a la altura de las circunstancias, que estuvo donde tenía que estar, y cuya buena relación y gestión ante el gobierno federal han sido fundamentales para atender a las familias afectadas. Pero sobre todo, ha sido una gobernadora muy responsable y atenta al sentir de los guerrerenses. Lejos quedaron esos tiempos en que llovía, llovía, ¿y el gobernador?... bebía y bebía. Nadie puede negar la saludable diferencia.

Aunque los adversarios políticos han tratado de poner a prueba a la gobernadora, se han quedado lejos de sus perversos fines, porque ha sido la naturaleza misma la que la ha probado y pese a las campañas de desinformación en su contra ha salido adelante haciendo lo que debe hacer, como lo ha demostrado al sacar adelante la atención a los peores desastres naturales en la historia de un estado que como bien dijo un finado ex gobernador: “No es Disneylandia”.

Dicen que la plata y el oro se prueban en el fuego. Evelyn Salgado ha sido probada entre vientos y tempestades, y ha salido avante hacia la segunda mitad de su mandato que ha ya ha comenzado a transcurrir.

No debe olvidarse. El tercer año de Evelyn Salgado como la primera gobernadora de Guerrero inició y concluyó atendiendo los estragos de dos de los peores huracanes en la historia del estado.

El 24 de octubre de 2023, apenas a unos días de cumplir su segundo año de gobierno, le tocó enfrentar los estragos del huracán más devastador de la historia del puerto. Otis con sus extraordinarios vientos hizo lo que ningún otro huracán: Destruyó toda la planta productiva de Acapulco, desde hoteles, restaurantes, comercios, incluso hundió la flota de embarcaciones de pesca deportiva y yates recreativos, además de damnificar casi la totalidad de las viviendas y afectar todos los servicios públicos.

En septiembre de 2024, unas semanas antes de cumplir su tercer año al frente de Guerrero, el huracán John derramó cantidades históricas de agua durante un periodo prolongado de tiempo, ocasionando deslaves, inundaciones y afectaciones carreteras que incomunicaron y afectaron a muchos guerrerenses en ambas costas, Acapulco, Chilpancingo y la Montaña.

Evelyn Salgado no solo es la mujer que rompió el llamado techo de cristal en el estado al ser la primera gobernadora guerrerense, también le tocó encabezar la reconstrucción y reactivación económica más grande en la historia de la ciudad más importante del estado por su tamaño, su generación de empleo y Producto Interno Bruto, así como su fama internacional.

Y cuando estábamos en eso John se convirtió en la cereza del pastel.

Pero en ambos casos se vio a una gobernadora a la altura de las circunstancias, que estuvo donde tenía que estar, y cuya buena relación y gestión ante el gobierno federal han sido fundamentales para atender a las familias afectadas. Pero sobre todo, ha sido una gobernadora muy responsable y atenta al sentir de los guerrerenses. Lejos quedaron esos tiempos en que llovía, llovía, ¿y el gobernador?... bebía y bebía. Nadie puede negar la saludable diferencia.

Aunque los adversarios políticos han tratado de poner a prueba a la gobernadora, se han quedado lejos de sus perversos fines, porque ha sido la naturaleza misma la que la ha probado y pese a las campañas de desinformación en su contra ha salido adelante haciendo lo que debe hacer, como lo ha demostrado al sacar adelante la atención a los peores desastres naturales en la historia de un estado que como bien dijo un finado ex gobernador: “No es Disneylandia”.

Dicen que la plata y el oro se prueban en el fuego. Evelyn Salgado ha sido probada entre vientos y tempestades, y ha salido avante hacia la segunda mitad de su mandato que ha ya ha comenzado a transcurrir.