Es en serio y bien otorgado este reconocimiento al fenómeno social de cultura y entretenimiento nacional. La lucha libre mexicana tiene pues, un día para conmemorar a los atletas -artistas que arriesgan el físico en cada lance que hacen y lo es el 21 de septiembre.
Muchos luchadores han fallecido arriba del ring por los golpes que reciben y otros más, ya en la vejez o retiro acaban con severas lesiones en la columna , espina dorsal, rodillas y cabeza , pero , eso sí, orgullosos muestran su frente raleada por las constantes heridas sangrantes producto de sus combates. Las orejas se les deforman por lo que se les conoce como orejas de coliflor. Pero , vamos vamos por partes.
La lucha en México se genera en 1863 con la intervención Francesa, pero no en la forma como la conocemos. Por lo que a Salvador Lutterot Gonzales se reconoce como el padre de la lucha libre en México, que en 1933 la trajo a México después de haberlo visto en el paso Texas. El primer luchador enmascarado fue el murciélago Velázquez creador de la patada a la Filomena.
La lucha libre mexicana tuvo una época del oro con grandes luchadores como el Cavernario Galindo, Gori Guerrero, el Santo, Blue Demon, Huracán Ramírez, Tarzan López,Black Shadow, Ray Mendoza y ya en los sesentas -setentas aparecen Mil Mascaras, René Guagardo, Karlof Lagarde, Aníbal, El Solitario, Ángel Blanco, Dr. Wagner. Tinieblas, rayo de Jalisco , Canek, etcétera.
Aunque en la lucha libre mexicana no se puede disociar de la figura carismática del máximo ídolo de la afición “El Santo”, el Enmascarado de Plata", quien supo aprovechar muy bien su popularidad explotando el cine y cómics. Después de El Santo, salvo mejor opinión de expertos creo que es “El Solitario”, el Enmascarado de Oro, quien empezaba a destellar en los cómics, pero nunca incursionó en el cine inexplicablemente y la muerte lo sorprendió joven aun.
Como embajador de nuestra lucha libre se le reconoce a “Mil Máscaras”, triunfador por todo el mundo y conquistador de Japón y EU. Huracán Ramírez basa su triunfo en películas dobladas por David Silva y también incursionó en los cómics sin el éxito del Santo. En cambio el eterno rival del Santo, con quien seguramente hubieran llenado el estadio azteca si hubieran apostado las máscaras, lo fue Blue Demon, un recio luchador con buen físico y maestría en el llaveo.
De la lucha libre podemos decir que es un fenómeno nacional ya que sus arenas de todo tipo se ven repletas por lo general. El ambiente en ellas crea una catarsis , donde los aficionados se transforman ante la gran actuación de los gladiadores quienes los hacen reír, enojar y hasta llorar en una misma función, por su gran capacidad histriónica. En las arenas no hay fifis o chairos ya que se confunden unos y otros en sus gritos , leperadas (simpáticas ) o frases como esa de “¡castígalo , castígalo sin compasión!, ¡ya vez cab… , esto te pasa por no estudiar! O a la viejecita simpática que le va a los técnicos, se le grita “señora ya métase al sarcófago” o "Sra. Váyase al panteón, nos está quitando el oxígeno. Todo esto se recibe con carcajadas y de buena manera con el corte de manga que hace el buliado a los buleadores.
Aunque también hay sentimientos encontrados con sufrimiento, cuando ven a su ídolo bañado en sangre y golpeado sin piedad. O cuando la autoridad se hace de la vista gorda y apoya ilegalmente a los rudos para que se siga castigando a los técnicos. La lucha libre sirve como el escape emocional de la tensión del ser humano (hombres y mujeres ). Al término de la función cada espectador vuelve a su lugar …”La zorra rica al rosal la zorra pobre al portal” como decía el poeta Antonio Machado. Pocas veces se ven peleas entre aficionados pero si en cambio suceden agresiones contra los representantes del bando rudo o sucio, por su papel sanguinario en contra del representante del bien , el luchador técnico o limpio.
Es pues la representación de la lucha eterna del ser humano entre el bien y el mal. Aunque la televisión le restó mucha atención y en un momento bajaron las entradas en las arenas , la lucha libre ha tomado un nuevo aire y ya se ven arenas repletas, pagando entradas sumamente caras , más lo que se consume de alimentos, los souvenirs , las firmas y la bonita foto del recuerdo con el luchador de moda para el niño de la casa ( el marido ) .
Los sueldos de los luchadores ya son más dignos para los estelares y de media función , aunque la gran mayoría gana cantidades irrisorias y peor aun no están dentro de la seguridad social, por lo que, cuando se lesionan es común que entre ellos mismos en el vestidor se acomoden los huesos ,otros aprenden de sus viajes al Japón la técnica de acupuntura y la emplean con sus compañeros y los más jodidos se gastan su poco dinero en mejórales alcohol y vendas.
Por supuesto que la televisión paga a la promotora por el espectáculo que difunden pero este dinero no llega a la mayoría de los gladiadores. Solo los luchadores Top llegan a ganar sumas grandes de dinero, prestaciones como viajar en avión y hotel de 5 estrellas. El apostar la máscara es una buena entrada de dinero para el luchador que ya va de retiro o el que se volverá a enmascarar.
En fin , que lo que menos importa en la lucha libre es quien gane y quien pierda, sino el espectáculo y el ambiente que ahí se disfruta ¡Viva la lucha libre Mexicana !
