En el mes patrio se recuerda a los personajes que participaron en la Guerra de Independencia. Hoy nos vamos a referir a esas grandes mujeres que participaron en esta gesta, como la señora María Faustina Benítez de Álvarez. Por muchos años se olvidaron de las mujeres que tuvieron un desempeño en esa guerra, algunas tomando un fusil, otras sosteniendo la causa económicamente, otras más incorporadas en cuerpo y alma a la lucha, sin ser percibidas porque tenían la tarea de la alimentación o de la ropa o hasta recargando fusiles.
La amnesia ha sido muy severa, porque en la nomenclatura de los estados o de los municipios, que van acompañados del apellido del héroe de la Revolución, o de la Independencia o de la Reforma o de otras causas, solo se tomó en cuenta al sexo masculino. En algunas calles los nombres se fueron dando de acuerdo con características del lugar, de algún hecho, determinada historia o de algunos personajes de la vida diaria, como en Acapulco, que existe una calle con el nombre de “El espanto” o en este mismo municipio las comunidades de “Salsipuedes” o “Agua Caliente” o “Cerro de Piedra” entre otros muchos.
Pero volviendo a que solo ponen los apellidos de los héroes varones a los estados, podemos mencionar por ejemplo: Querétaro de Arteaga, por José María Arteaga, que aunque fue un destacado personaje, debiera de ser Querétaro de Ortiz, como homenaje a la gran mujer que fue la corregidora Josefa Ortiz de Domínguez, quien fue una gran luchadora, que no sólo se concretó a dar aviso de la conspiración descubierta, sino a participar en apoyo a los insurgentes, por lo que sufrió persecución y estuvo en situación de arresto muchos años. También de ella hablaremos en este mes dedicado a la Independencia de México.
Y nos podríamos seguir, hay también una deuda con Leona Vicario porque además de periodista, se incorporó al movimiento por la independencia, con su esposo Andrés Quintana Roo, ayudando económicamente, en llevar mensajes y ser escuchada en los planes estratégicos, viviendo a salto de mata, al esconderse de los realistas. Al contrario de que pusieran su nombre en su lugar de nacimiento, lo pusieron en un pequeño poblado del estado donde nació su esposo Andrés Quintana Roo; Seguimos con los nombres, Toluca de Lerdo, por Lerdo de Tejada, Guerrero de los Bravo, Acapulco, de Juárez; y siguiendo con los municipios, Atoyac de Álvarez, San Gerónimo de Juárez, Tecpan de Galeana, Zihuatanejo de Azueta etc.
Sólo Coyuca de Benítez, entre cientos de municipios, tiene a una mujer: doña Faustina Benítez de Álvarez, esposa del que fuera presidente de México Juan Álvarez, sin la N por favor; ella estuvo en la lucha independentista, pero a pesar de que no sufrió persecución como Leona Vicario o Josefa Ortiz, se ganó un lugar entre los coyuquenses, haciendo algunas obras y, dentro de sus cualidades, si así se puede llamar, está que jamás se sintió “Primera Dama” y menos fue a ocupar un lugar con su esposo en la Capital de la República, puesto que se quedó en su casa de la colonia Providencia, donde creía que era más útil.
¿Desde cuándo Coyuca es de Benítez? De acuerdo con la enciclopedia guerrerense “El 6 de febrero de 1852, por Decreto 5, se elevó a rango de la categoría pueblo, a la de ciudad; asimismo se le agregó de, Benítez, en honor a la señora María Faustina, esposa del general Juan Álvarez”. Al llegar a Coyuca de Benítez, o cuando el viajero pasa por ese lugar de Sur a Norte se encuentra a la entrada con la estatua de doña Faustina de pie con su vestido largo a la usanza de aquella época, como dando la bienvenida.
En este nuevo reordenamiento social se busca reivindicar a las mujeres en la historia de nuestro país; en mi artículo pasado mencioné el cambio de nomenclatura de dos calles de la Ciudad de México que llevarán: una, el nombre de Benita Galeana, y la otra, de Elena Garro. Se menciona que así va a ser con diez mujeres destacadas. Es parte de hacer justicia por todo lo que estaba pendiente en la agenda feminista.
Así también Sara Sefchovich habla de Faustina Benítez en su libro “la Suerte de la Consorte, refiriéndose a esta señora, orgullo de las y los guerrerenses.¡ Vivan las mujeres que nos dieron patria y libertad!.